CRÍTICA DE LA PELÍCULA "4 LUNAS"

Por Jose Alejandro Fernandez Condori

Sin Filtros.

La película “4 Lunas”, dirigida por Sergio Tovar Velarde, es un filme producido en México. Trata de cuatro historias de amor entre homosexuales. El nombre de esta obra hace referencia a las cuatro  fases de la luna y todas estas tienen una relación con cada una de las historias que narra esta producción.

Luna Nueva cuenta la historia y problemas de un niño al sentirse atraído por su primo. Luna Media se relaciona con dos jóvenes amigos que se reencuentran en la Universidad intentando llevar una relación. Luna Llena trata de una pareja de novios que llevan juntos 10 años pero que en este momento (tiempo de la historia) tienen un problema en su relación. La última fase de la Luna es Luna Menguante, donde un hombre de la tercera edad que, que al tener una familia, lleva una doble vida al querer una aventura sexual con un joven que cobra por servicios sexuales.

Esta producción se presentó en un contexto (en México y no muy distinto a varios países latinoamericanos incluyendo nuestro país) donde la comunidad LGBTI lucha por igualdad de derechos y una forma de vida “normal”, el Director evitó mostrar a los espectadores un producto lleno de estereotipos asi como se vio en algunas/varias películas pasadas con temática homosexual, donde el protagonista gay se viste de mujer o actúa de manera amanerada.

Es un filme elegante, que tiene como eje central la auto aceptación y los problemas que tiene una persona en su vida emocional, dando asi un mensaje directo sin llegar a lo obsceno o vulgar, teniendo un tratamiento en el cual se muestre todo con mucha naturalidad. Este aspecto incluso se ve en los problemas que tiene cada personaje dentro de su contexto y lleva al espectador a poder identificarse con cualquiera de ellos o de las historias.

Debo añadir el hecho de que en cierto punto, hay un par de historias a las que se las podría haber manejado de manera más desarrollada. Luna Nueva y Luna Menguante quedan un poco cortas a comparación de las otras dos historias. Esto me genera una cuestión muy grande en cuanto a cómo podemos tomar la sexualidad u homosexualidad a estas edades. Sin embargo, esto no afectó la manera en que vi la dedicación con la que se maneja este tema que suele ser un tabú para nuestra sociedad.

También debo aceptar que no soy muy fanático del romance y de las “historias de amor”, pero  Sergio Tovar, quién también escribió el guion de la película, plasmó en esta producción una faceta muy reconfortante, que acompañada por la música terminarían por agradar a todos. No es exclusiva para un público gay (como suele pasar normalmente con las películas con temática homosexual) pero, como mencione en líneas anteriores, uno puede identificarse con los personajes y los problemas y sentirse uno más dentro de la obra, porque después de todo ¿Quién no ha sufrido por un rompimiento amoroso alguna vez?